Diagnóstico participativo
El objetivo a la hora de transformar mi aula debe ser que consiga en mis alumnos el efecto motivador de asistir a las clases de música más contentos y a la vez que se sientan a gusto.
Para ello he recogido las opiniones e ideas de todos los grupos a los que imparto clases (de 1º a 6º de primaria), a algunos compañeros de claustro y algunos padres.
El instrumento utilizado ha sido un papel en el cual habían tres preguntas a responder por equipos de cuatro o cinco alumnos, ya que he buscado que esta actividad también supusiera una actividad en grupo y un elemento de debate y opinión entre los alumnos. Las preguntas eran sobre tres temas:
- Que es lo que más les gusta del aula.
- Qué es lo que menos les gusta.
- Qué cambios harían ellos.
Después de revisar los resultados, a lo que más importancia le han dado ha sido al mobiliario y la decoración.
El mobiliario hace referencia a que aunque les gusta el tipo de sillas (con pala), les gustaría que renováramos la s que tenemos, ya que consideran que son viejas y podríamos poner unas nuevas y con más colorido.
En cuanto a la decoración, la propuesta más extensa ha sido que podríamos cambiar la decoración de las paredes todos los años mediante dibujos y murales confeccionados por ellos mismos.
Mis compañeros, en cambio, piensan que algo a mejorar sería la insonorización del aula porque dicen que en ocasiones la música y las voces de los niños cuando hacemos las actividades en clase suelen escucharse en algunas zonas del colegio.
Los padres han sido menos atrevidos a la hora de emitir sus opiniones y se han decantado por la opción de reafirmar las peticiones de los niños debido a que quieren lo que ellos quieren, porque así saben que sus hijos estarán más a gusto en el centro.
Como reflexión podemos considerar un par de aspectos:
El primero, en lo referente a la decoración del aula, es algo que con un poco de organización y gusto, podemos conseguir que cada año el aula tenga un aspecto nuevo, y además, gracias a la colaboración de los mismos alumnos, cosa que ayuda a que hagan un poco más suyo el centro. Así que ganamos en complicidad e implicidad.
El segundo, es algo más complicado de conseguir, ya que mejorar la insonorización del aula es algo más costoso y difícil de conseguir. No obstante, será una de las cosas que expondré a la dirección del centro para que sea tomada en cuenta para futuras reformas.